El entrenador George Karl, ahora comentarista de televisión, dijo abiertamente que no era partidario del nuevo modelo porque a nivel del deporte del baloncesto no aportaba nada positivo, al contrario, camisetas de baloncesto perjudicaba a los jugadores. Llull llegó al club blanco en 2007, con 19 años y procedente del Manresa. Durante la siguiente campaña, la Euroliga fue testigo de la primera ‘mandarina’ decisiva del mallorquín.